Si se lesiona en su lugar de trabajo, lo primero es reportar el incidente a su supervisor lo más pronto posible y buscar atención médica. Es muy importante que guarde todos los papeles y récords médicos. Después, es buena idea hablar con un abogado de compensación al trabajador para que le explique sus derechos y le ayude a recibir el dinero que necesita para cubrir sus gastos médicos y salarios perdidos.
La mayoría de los abogados de lesiones personales en California ofrecen la primera consulta totalmente gratis. En esta cita, usted puede contarles lo que pasó, y ellos le dirán si tiene un caso. Muchos de estos abogados trabajan con un acuerdo de contingencia, lo que significa que solo cobran si ganan su caso. Así no tiene que pagarles nada de su bolsa para empezar.
En California, su estatus migratorio no debe impedir que usted pida una compensación si alguien le choca y usted no tuvo la culpa. Las leyes del estado protegen a todas las personas que sufren un accidente. Un abogado con experiencia en estos casos puede proteger su información y asegurarse de que sus derechos sean respetados sin temor a problemas con inmigración.
Tener un abogado que hable su idioma le da la confianza de que lo están entendiendo bien. Le podrá explicar las leyes y sus opciones claramente, usando palabras que usted conoce. Para la comunidad latina, un abogado hispano puede entender mejor las costumbres y preocupaciones, dándole el apoyo necesario para que se sienta en confianza durante un proceso legal.
Si vive en California y tiene un problema legal, es clave saber qué tipo de abogado necesita. Un buen profesional puede ser su mejor aliado en casos de accidentes, problemas de inmigración, o conflictos en el trabajo. Para nuestra gente de habla hispana, es todavía más importante encontrar a alguien que entienda no solo las leyes, sino también nuestro idioma y cultura. Aquí le explicamos los abogados que más pueden ayudarle.
Si las deudas de tarjetas, del hospital o de impuestos ya no lo dejan dormir, un abogado de bancarrota puede ser la solución. Él o ella puede proteger sus bienes, como su casa o su carro, para que no los pierda. Muchos de nuestros paisanos han pasado por esto. Un abogado que hable español le explicará el proceso de forma sencilla para que pueda tomar el control de su dinero y empezar de nuevo con el pie derecho.
No importa qué tan fea se vea la cosa, siempre hay una salida. Un abogado honesto analizará su situación y le dirá cuáles son sus opciones. El estrés por el dinero es algo muy pesado, y ellos están para ayudarle a encontrar la calma otra vez.
Si por mala suerte sufre un accidente, ya sea un choque, una caída en una tienda, o una lesión en el trabajo, un abogado de lesiones personales es quien pelea por usted. Ellos se aseguran de que reciba una compensación justa para pagar los gastos del doctor y el tiempo que no pudo trabajar. Un buen abogado se encarga del pleito legal para que usted solo se preocupe por recuperarse.
"La verdad, uno no sabe ni por donde empezar despues de un choque. mi abogado se encargo de todo el papeleo y las llamadas. Al final, consiguio mas de lo que la aseguranza me queria dar al principio. Valio la pena." - Ana M.
Lo bueno es que casi todos estos abogados trabajan a base de "si no ganamos, no cobramos". Esto quiere decir que no tiene que arriesgar su dinero. Si tuvo un accidente, no se quede con la duda y llame para una consulta. Ellos están para protegerlo y luchar por lo que es justo para usted.
Para cualquier trámite de papeles, como la residencia, la ciudadanía, o si necesita asilo, un abogado de inmigración es esencial. Las leyes de inmigración son muy enredadas y cambian a cada rato. Un abogado que hable español le puede decir qué camino tomar y qué se necesita para evitar errores que pueden costarle caro. Ellos entienden que el futuro de su familia está en juego.
Hay oficinas que se dedican solamente a casos de inmigración. Conocen bien cómo trabaja "la migra" (ICE) y saben cómo llenar las formas para que todo salga bien. Si el inglés no es su fuerte, tener un abogado hispano es una gran ventaja. No deje para después algo tan importante como su estatus legal.
En momentos difíciles como un divorcio, una separación, o peleas por la custodia de los niños (child support), un abogado de familia es un gran apoyo. Estos asuntos son muy personales y duelen. Un buen abogado buscará la mejor solución para usted y para sus hijos, siempre con mucho respeto. Su meta es que los acuerdos sean justos y que los niños sufran lo menos posible.
Un divorcio es un trago amargo, pero no tiene que pasarlo solo(a). Un abogado de familia le quitará un gran peso de encima, pues ellos se saben las leyes y cómo defender sus derechos. Si está en medio de una separación, busque ayuda profesional cerca de usted.
Si lo acusan de un crimen, por chico o grande que sea, necesita un abogado penalista de inmediato. Estar en problemas con la ley da mucho miedo, y más si no entiende bien el sistema. Su abogado es quien dará la cara por usted en la corte para defender su inocencia o para conseguirle la menor sentencia posible. Todos tenemos derecho a una defensa, sin importar de dónde vengamos.
Enfrentar a un juez es algo muy serio. Por eso es vital tener un abogado que hable su idioma y que conozca bien cómo se manejan las cosas en las cortes locales. Él investigará su caso a fondo para encontrar la mejor manera de defenderlo. No deje que el idioma sea un obstáculo para su defensa.
Nadie tiene derecho a tratarlo mal en su trabajo por ser latino, por su acento, o por su color de piel. Si siente que lo están discriminando, si le pagan menos que a otros, o si lo despidieron sin una buena razón, un abogado laboral puede defenderlo. Hay patrones que se aprovechan de nuestra gente, pero la ley está para protegerlo.
Su trabajo debe ser un lugar donde lo respeten. Si no es así, no se quede callado. Un abogado puede ayudarle a poner una queja, a demandar a la compañía, y a conseguir una compensación por el mal trato. Recuerde: usted tiene derechos como trabajador, y hay quien puede ayudarle a defenderlos.